Ya lo decía la canción del Duo Dinámico…

“… el final del verano llegó, y tú partirás”

Y sí, el final del Verano está llegando y con él la temporada por excelencia para las vacaciones… pero ¿y el Otoño? ¿Partirás de viaje en esta mágica estación? Cada vez con más los viajeros que esperan al otoño para sus viajes más o menos largos, más o menos cerca… ¿por qué?

Por las temperaturas, más suaves 😉

Y es que en verano hay destinos que se nos hacen difíciles para disfrutar con las altas temperatura estivales, sobre todo aquellos llenos de cultura e historia, como los países del Mediterráneo, donde lo de largas jornadas de visitas con cerca de 40º nos echan para atrás.

Pero otoño, todo cambia. Se aguanta más andando, y por ende se disfruta mucho más, ya sea para hacer rutas de senderismo en la naturaleza, como para maratonianos días de turismo urbano… Egipto, Marruecos, Jordania, Tunez… incluso la desconocida Omán son ideales en estas fechas.

Por sus increíbles colores

El otoño es la estación donde los dorados se mezclan con los naranjas y rojos más fogosos en los bosques de caducifolios, es momento de disfrutar la naturaleza que nos regala fascinante paisajes desde la Selva de Irati en Navarra hasta Japón.

Y mientras los ocres se tornan amarillos dotando de color las ciudades más grises y lluviosas, ya sea París, Londres, Nueva York… la magia otoñal las envuelve.

Por sus evocadores sabores

Empieza la temporada de setas, de castañas, calabaza, membrillo, y por supuesto ¡del vino! El otoño es una excusa ideal para un viaje gastronómico.

¿Sabías que Europa es el continente con más setas y con la mayor cultura culinaria de estas? Para los amantes de las setas, es momento para recorrer los bosques europeos, ya sean los Alpes o los Apeninos, pero hay más… en Italia, entre Emilia-Romaña y Liguria, discurre la «Strada dei Funghi», la Ruta de las Setas; en Austria, destacan los Rosental que se pueden encontrar en los bosques fronterizos con Eslovenia; en Alemania hay que perderse en la Selva Negra y al sur de Múnich. Es cierto que no podremos recolectarlos sin permisos, ya que este está reservado solo para los autóctonos, pero si podremos disfrutar su sabor en multitud de recetas tradicionales o de vanguardia de sus distintas  cocinas.

Las castañas son un auténtico icono del otoño en Europa, gracias al Castaño Europeo que se extiende desde Rusia hasta Portugal las ciudades más frias entran en calor con un buen cucurucho de castañas asadas, aunque la forma de asarlas no sea la misma en Madrid que en Lisboa. Pero la castaña no se queda ahí, en Francia por ejemplo han hecho una «delicatesen» con este fruto, la crema de castañas o «crème de marrons», que inventó en 1885  el  francés Clément Faugier para aprovechar las castañas que se rompían durante la elaboración de las castañas confitadas, las deliciosas «marron glacé», y que podremos disfrutar en cualquier destino del país vecino.

No se queda atrás la calabaza, la reina indiscutible de las noches de Halloween de todos los países anglosajones. Cualquier escapada a Estados Unidos en todos los santos, y la noche del 31 de Octubre, será una aventura gastronómica y de miedo. Pero en España no nos quedamos atrás, ahí están nuestros buñuelos de viento rellenos de cabello de ángel… esas deliciosas hebras dulces hechas de calabaza. Y no podía faltar el vino, el otoño es la época de la vendimia, ideal para cualquier recorrido en el que disfrutar los caldos de regiones de España, Francia, Italia, Eslovenia… y porqué no, saltando el charco un recorrido por los valles vinícolas de California!

Porque el turismo baja…

Y eso significa tranquilidad en los destinos más solicitados y masificados en verano. Por ello hay viajeros que huyen de las grandes aglomeraciones de turistas, y saben que el otoño es la estación ideal para viajar: sin colas en monumentos, sin problemas para encontrar sitio en ese restaurante especial para cenar, … e incluso si buscas destinos de playa, olvídate de madrugar para buscar un huevo donde poner la toalla. Por no hablar que al bajar el numero de viajeros, los precios bajan a todos los niveles… y eso siempre viene bien 😉

O porque nos gustan las fiestas.

Sí, con el otoño no acaban las festividades y festivales… y todo lo que sea vivir las tradiciones locales.

Ahí está Munich con su Oktober Fest estrenando la llegada del Otoño. La excusa perfecta, de los amantes de la cerveza, para hacer turismo de finales de septiembre al comienzos de octubre. Esta fiesta se remonta a 1810 y una carrera de caballos que tuvo lugar durante la boda de dos miembros de la realeza bávara, tal fue la fiesta que desde entonces se repite cada año, y la protagonista indiscutible es la cerveza.

Vale que este año se cancela por la pandemia, y se espera que vuelva en Septiembre de 2022, pero igualmente, ¿por qué no ir conociendo Munich y sus cervezas?

Claro, que para los que prefieren el vino a la cerveza, en la ciudad de Lviv, al este de Ucrania,  el vino corre a raudales ya en el siglo XVII los alrededores de la ciudad estaban cubiertos de viñas que producían más de un centenar de barriles de vino al año para los monasterios de la zona. Lviv es probablemente la ciudad más particular de Ucrania, con su centro histórico de colorido inolvidable, hay quienes la comparan con Praga y Cracovia. Sea como sea es un destino diferente, donde disfrutar del Festival de quesos y vinos ucranianos, generalmente en la segunda mitad de octubre, aunque este año parece que desde fuera de las fronteras nos quedaremos con las ganas.

Ya hemos hablado de Halloween en Estados Unidos, pero ¿y el día de los Muertos en Mexico? La genuina fiesta en la que durante los días 1 y 2 de noviembre, se fusionan las tradiciones precolombinas y españolas; y que se ha ganado el reconocimiento llegando a ser Patrimonio Inmaterial de la Unesco. Según la tradición indígena, en el Día de los Muertos el alma de los difuntos retorna de forma transitoria al mundo de los vivos, así los familiares de los difuntos preparan un altar con objetos, comida y bebida favoritos de sus difuntos, para que sus almas disfruten  los honores que se les ofrecen en su momentáneo regreso. Es din duda una celebración festiva, de alegría y “reencuentro”, en la que no dejan de adornan las tumbas con flores y colocar altares sobre las lápidas, una experiencia única.

¿Aún te faltan motivos para seguir viajando en otoño?

Pues también pasa que hay viajeros a los que simplemente les gusta viajar en otoño, porque es el momento ideal en destinos del otro lado del mundo, porque buscan alargar el verano en las playas tropicales como el caribe, Maldivas… o del hemisferios Sur ya sea Mozambique o Bali, o porque es cuando pueden evitar los monzones de Tailandia o. las exóticas islas malayas.

No nos faltan los motivos… ¿y a ti?