Alojamientos únicos en Marruecos
Marruecos nos ofrece una gran variedad de alojamientos con mucho encanto, ya sea un Riad o Dar tradicional, un bonito hotel boutique o un gran hotel de lujo, … y por supuesto las haimas para vivir las noches más mágicas en el desierto.
Riad o Dar
Los Riad y dar son las casas o palacios tradicionales marroquíes donde destaca el jardín o patio interior como elemento central, de hecho Riad viene del árabe jardín, o edén, por ello normalmente Riad se refiere más a las casas con jardín interior, árboles frutales y plantas, mientras que el Dar solo tienen un patio central.
Los Riads o Dar convertidos en hoteles, en las principales medinas del país distribuyen las habitaciones de los huéspedes en torno a patio. Por supuesto tienen pocas habitaciones, por ello su ambiente es más familiar y acogedor , acorde a un hotel boutique. Los riads son decorados con mucho encanto, ya sea en estilo tradicional, chic o minimalista…
Y siempre tienen una ubicación céntrica, en el corazón de la medina antigua o aledaños, lo que resulta ideal para visitar a pie las medinas en que nos alojemos.
Kasbah
la Kasbah hace referencia en árabe a lo que es una fortificación principal, o alcazaba. A diferencia del Ksar que es la fortificación de toda una ciudad, como un alcázar.
Las Kasbahs las encontraremos a medida que nos adentramos en el sur de Marruecos, más allá del Atlas.
Muchas Kasbahs son visitables, por su gran valor histórico y arquitectónico, otras muchas están en ruinas, pero afortunadamente muchas están siendo recuperadas y convertidas en alojamientos, ya sean casas más rurales o encantadores hoteles boutique, con el mismo sentido de la hospitalidad que en un riad o Dar.
Dormir en una Kasbah de paredes enormes de barro rojizo, es toda una experiencia, además suelen tener jardín exterior, pueden contar con piscina, y siempre con unas magníficas vistas, recordemos que debían estar bien situadas para ser protegidas.
Jaima o Haima
Jaima es como se conoce a la tienda de campaña de los pueblos nómadas del norte de África. Hecha a base de piel de camello o cabra.
En Marruecos las familias nómadas bereberes siguen utilizándolas, pero también los viajeros pueden vivir la experiencia de vivir en un jaima, desde las versión más básica y auténtica, durmiendo en el suelo sobre colchones cubiertos por mantas pelo de camello y a la luz de una vela; hasta las jaimas más lujosas, que sustituyen las pieles de camello por telas más exóticas e incluso con baño privado.
Dormir en un campamento de jaimas en el Sahara, entre las dunas y bajo un cielo estrellado es una experiencia que hay que vivir en Marruecos, la paz y el siencio del desierto, roto por el crepitar del fuego, y con suerte las canciones bereberes de nuestro anfitriones.