De Mar y Playas en Grecia

Islas Cícladas

Estas son las islas de las imágenes que tenemos en la retina cuando soñamos una isla griega… Casas de color blanco y cúpulas azules combinando con el azul del mar y del cielo, excelentes playas, la cálida hospitalidad de su gente, e iglesias encaramadas en sitios imposibles.

El nombre “Cícladas” significa “islas circulares”, en referencia a las islas que forman un círculo alrededor de la isla de Delos y comprenden alrededor de 220 islas e islotes de las cuales solo 27 están habitadas.

Entre estas las más conocidas y visitadas son: Mykonos por su vida nocturna y Santorini por su preciosa puesta de sol.

Pero todas las Cícladas tienen algo algo especial, y ofrecen algo diferente para cada viajero:

Santorini es la isla idílica griega, blanco sobre azul y tremendamente romántica. Es la isla más conocida de las Cícladas y sin duda una de las más bonitas. En realidad es un conjunto de islas volcánicas surgidas por la explosión del volcán que ocupaba la gran caldera hace 20.000 años.
Mikonos por su parte es la isla más cosmopolita de Grecia, donde el glamour se mezcla con la sencilla vida de los lugareños. Uno de los rincones más pintorescos de la isla es “La Pequeña Venecia”, un distrito del siglo XVIII, dominado por grandes mansiones con balcones coloridos posados sobre el mar
Milos, la isla volcánica de paisaje lunar donde las aguas azules y las rocas rojas, amarillas, blancas y negras de su costa crean un impresionante paisaje de belleza única. Además es conocida por la famosa estatua de la “Venus de Milos” que se puede ver en el Museo Louvre.
Folegandros puede presumir de tener la capital más bonita del archipiélago, la ciudad está construida alrededor de una fortaleza veneciana. Esta pequeña isla rocosa es de gran belleza con playas poco visitadas, gente encantadora y una rica gastronomía es perfecta para quien busca relax.
Amorgos tiene playas salvajes con magníficas cuevas que hacen las delicias de los buceadores, y senderos antiguos para los amantes del trekking entre terrenos rocosos y empinados. Destaca en Amorgos el monasterio de Panagia Hozoviotissa, construido en el punto más alto de una empinada montaña, a 300 m sobre el mar Egeo y visible sólo desde el mar.
Ios y Andros mantienen su larga tradición naval, pero Ios ha ganado fama por la fiesta que parece no tener fin en las calles adoquinadas de Chora, Y Andros por su lado está cubierta por cadenas montañosas que se alternan con valles fértiles de olivos y cítricos, terminando en playas preciosas.
Sifnos y Serifos son ideales para el que busca relax. Sifnos con sus pueblos tradicionales, playas de todo tipo, y 227 iglesias repartidas por la isla más culinaria de Grecia. Serifos es por otro lado una isla ideal para unas vacaciones tranquilas, pues aún no ha sido invadida por el turismo, además de 72 playas, Serifos tiene 7 senderos señalizados para realizar trekking por libre.
Naxos, es la isla más grande y tiene mucho que ofrecer de cultura, historia y naturaleza. Destaca su castillo veneciano y la montaña más alta de las Cícladas, pero también algunas de las mejores playas de las Cícladas.
Koufonisia enamora por sus aguas azules, es el destino ideal para aquellos que busquen relajarse en playas protegidas, pequeñas piscinas naturales de aguas de color turquesa, sin que falte la fiesta.
Paros y Antiparos. Paros tiene el bonito pueblo de Naoussa, es un aisla muy fértil, y fue mucho tiempo famosa por la calidad de sus mármoles. Una estrecha franja de mar separa Paros de Antiparos, tienen un castillo veneciano del siglo XV y preciosas playas. Y es que ambas islas son conocidas por sus playas de arena dorada, sus aguas azules y el animado ambiente nocturno.
Syros, su ciudad de Ermoupoli, con preciosas mansiones neoclásicas, ha sido llamado “la Manchester de Grecia” por su actividad económica. Hoy es un destino ideal para familias y parejas que buscan tranquilidad en sus playas.

Islas Jónicas

Las Islas Jónicas se encuentran en la costa occidental de Grecia. Son islas cargadas de historia y leyendas.

Con una orografía muy escarpada y un clima templado que regala tierras fértiles y verdes, con grandes viñedos y árboles frutales, y por supuesto costas en las que abundan playas espectaculares.

Las islas principales son:

Cefalonia. Es la isla más grande de las Jónicas, cuenta con unas playas de ensueño en las que perderse y unos acantilados que retener en la memoria para siempre.
Corfú. Debido a su posición estratégica fue conquistada sucesivamente por venecianos, franceses e ingleses que dejaron a su paso monumentos y elementos de su cultura. La ciudad de Corfu fue declarada Patrimonio Artístico de la Humanidad, siendo la mayor ciudad medieval mejor conservada de Grecia y una de las más bonitas del Mediterráneo. Es una isla para quien busca atractivas culturales además de playas y naturaleza, que de eso no falta, en su costa salvaje y virgen.
Léucade. Esta isla se caracteriza por sus aguas de color esmeralda y sus numerosas calas , es una de las dos únicas islas griegas a las que se puede acceder en coche, pues se separa del continente por el canal Drepanos de 50 m de ancho y se conecta con la costa por un puente levadizo.
Zante o Zakynthos. Conocida como “la Flor de Levante”, nombre que le dieron los venecianos que gobernaron Zante desde 1484 hasta 1797, la influencia veneciana aparece reflejada en su arquitectura. Además cuenta con playas de estilo caribeño y preciosas calas. En la costa oeste de la isla de Zante están las playas más espectaculares entre las rocas y el color azul profundo del mar, pero la gran mayoría son accesibles sólo por mar, destaca la playa más fotografiada de Grecia, el Naufragio. En la costa este las playas son de arena, con calas tranquilas y más accesibles. Además al sur de la isla se reproducen las tortugas Caretta Caretta y a lo largo de la rocosa costa occidental se reproduce la foca Monachus.
Ítaca. La patria de Úlises, una isla con muy poco desarrollo turístico pero de increíble belleza. En parte es poco visitada porque no tiene playas espectaculares como las islas vecinas, pero en cambio el amante de la Mitología puede buscar los pasos de Ulises en:
- Fuente de Aretuhusa, supuestamente el lugar donde Eumeo, el fiel porquero de Ulises, llevó a sus cerdos a beber, un sendero de 3 horas por un paisaje virgen con vistas sobre el mar.
- Cueva de Eumeo y el un peñasco conocido como Korax (el cuervo), que coincide con la descripción de Homero de la reunión entre Ulises y Eumeo. De regreso por la misma ruta podremos descansar en una pequeña cala.
- La Cueva de Las Ninfas. Dicen que es donde Ulises en su regreso ocultó los regalos que le dio el rey Alkinous, está cerca de la playa Doxa.
- Alalkomenae, el llamado “Castillo de Ulises” por Heinrich Schliemann, quien llevó a cabo las excavaciones que desenterraron una cámara funeraria micénica y objetos domésticos como jarrones, estatuillas… aunque al parecer corresponde a 3 siglos después de Homero.

Islas del Dodecaneso

Son un conjunto de doce islas en el borde sureste del Egeo, que forman un puente entre Europa y el Este, y es por ello que se pueden apreciar restos de pueblos y culturas que han dejado huella a lo largo de los siglos: jonios, romanos, bizantinos, venecianos, otomanos e italianos… además de un sinfín de playas e islotes inexplorados,

Cada isla tiene un carácter propio, y es especial a su manera. Hay islas para quienes buscan un turismo activo: buceo, snorkel y todo tipo de deportes acuáticos. Pero también para quienes buscan unas vacaciones de relax, un viaje más tranquilo e íntimo, donde tomar el sol, nadar y relajarse en cualquiera de sus calas.

Veamos sus islas más recomendables:

Rodas, con la ciudad medieval más extensa de Europa, donde dejaron huella los caballeros de la Orden de San Juan de Jerusalén con la construcción de la gran muralla, pero también con su rico legado histórico de la antigüedad como la acrópolis y su templo dórico, el antiguo estadio, la antigua acrópolis de Lindos, Ialisos y la antigua Kamiros. Rodas encabeza la lista por su interés cultural, y además es el mejor lugar en el que practicar windsurf en la región de Prassoni.
Karpathos, la tercera de las islas tiene una orografia accidentada, es atravesada por una franja montañosa habitualmente cubierta de nubes se eleva a más de 1200 m, por lo que es ideal para hacer trekking por sus senderos de excepcional belleza que se encuentran junto a acantilados de la montaña con vistas al mar. Destacan la antigua Vroukounda y Artesia, con los palacios de estilo dórico Nisyros en el islote de Saria.
Patmos, la Isla Santa y PAtrinomio dela Humanidad. Esta isla sagrada fue donde San Juan escribió el Libro del Apocalipsis,. Pero también es un destino ideal para los amantes de la naturaleza por su costa de escarpados acantilados y su tierra volcánica.
Kos, es la isla de Hipócrates, el padre de la medicina actual, se puede visitar el árbol milenario que dicen que el mismo plantó y abjo el cual daba sus clases. Además goza de 112 km de playas, desde donde se pueden ver filas y filas de velas en la distancia.
Kalymnos es un paraíso para los escaladores, cuenta con algunas de las mejores rutas de escalada en Europa, con 60 lugares de escalada y 1.300 senderos señalizados. Para los que prefieran las profundidades del mar pueden emular a los pescadores de esponjas de Kalymnos.

Islas Espóradas

Espóradas significa dispersas, así este archipiélago disperso en el Mar Egeo se compone de un conjunto de once islas mayores, pero sólo cuatro están habitadas:

Alonissos, cuenta con unas playas preciosas y paisajes naturales únicos de pinares, olivares y huertos. Está rodeada de pequeñas islas esparcidas, y es ideal para aquellos que desean relajarse y disfrutar del mar y de los paseos en la naturaleza.
Skopelos, es la isla más verde de Grecia. La mitad de su territorio está cubierto de bosques vírgenes de pinos. Sus aguas azules, las costas doradas y sus pueblos de arquitectura tradicional de Pelión crean una imagen natural impresionante.
Skiathos es la isla más cosmopolita de las Islas Espóradas, un verdadero paraíso en la tierra de frondosos pinares y aguas cristalinas. A pesar del rápido crecimiento del turismo la isla sigue siendo pintoresca y virgen.
Skiros, guarda tesoros de la historia por los muchos conquistadores que pasaron por aqui, y esta isla tiene una raza de ponis propia de la isla, una raza única. Pero es que además se puede disfrutar de algunas de las playas más hermosas de Grecia por sus aguas cristalinas, arenas doradas a orillas de verdes pinares.

Islas del Egeo Norte

Estas son un conjunto de maravillosas islas que cuentan con castillos y mansiones nobles, entre la belleza salvaje de su naturaleza. Cada isla de esta región es única y tiene su propia identidad, además no son islas masificadas por el turismo, así que uno puede descansar y relajarse junto a la playa o ir a explorar sus tesoros.

Cuentan con magníficas playas de arena y aguas transparentes, pintorescos pueblos de montaña, acantilados, una deliciosa gastronomía, y una rica historia… que más se puede pedir. Son islas perfectas para disfrutar cuando recorremos el Norte de la Grecia Continental.

Las islas más grandes son especialmente ideal para familias, parejas y grupos de amigos:
- Samos es una isla de historias y leyenda, de gran belleza. Fue el centro de la civilización jónica, y la isla del padre de las matemáticas, Pitágoras, del astrónomo Aristarco y del filósofo Epicuro. Por su montañosa orografía resulta muy atractiva para los amantes del ciclismo y el senderismo. Pero también cuenta con gran variedad de playas para relajarnos, y para el turismo en familia.
- Chios es una isla famosa por la producción de la mastiha, un licor muy apreciado entre los griegos. Este es un destino ideal para vacaciones tranquilas con familia por sus maravillosas playas, entre las que destacan: Emporios, Mavra Volia, Karfas y Vrondados, esta última playa pequeña a solo 4 km de la ciudad de Chios es muy atractiva por las tabernas de pescado al lado del mar.
Entre las islas más pequeñas, paraíso para los navegantes y viajeros intrépidos:
- Ikaria Tomó su nombre de Ícaro, hijo de Dédalo, según la mitología ambos se escaparon del Rey Minos con la ayuda de unas alas que fabricó Dédalo. Esta isla es sinónimo de la tranquilidad, pero además de por sus playas, es perfecta para vacaciones alternativas, para los que gustan de vivir la auténtica cultura griega, ya que cuenta con multitud de festivales tradicionales, dond epor supuesto hay que bailar el tradicional “ikariotikos”.
- Lesbos. La tercera isla más grande de Grecia, es famosa por dos productos, el ouzo y el aceite de oliva y, desde luego, por su encanto y su clima suave. Destaca elpueblo de Skala Eressos, con sus 3 kmde playa virgen de aguas cristalinas, además ofrece una gran variedad de servicios para el relax: clases de yoga, masajes, terapias diversas y por mucho más… es un destino muy apreciado por las viajeras, esta ciudad de nacimiento de la poetisa Safo acoge cada mes de septiembre el Eressos Women Festival que durante dos semanas se puede disfrutar de conciertos, exposiciones, actividades al aire libre.
- Limnos es un destino para unas vacaciones tranquilas en contacto directo con la naturaleza, con un golfo protegido, extensas playas y paisajes de rocas volcánicas con cascadas y aguas termales, entre pequeñas colinas donde descubrir pueblos tradicionales de casas de piedra. Donde no faltan playas, desde las más animadas a las más escondidas y recónditas.

Creta

Creta es la isla más grande de Grecia, y la quinta más grande del Mediterráneo. Un pequeño universo lleno de bellezas naturales, lugares históricos y 960 km de costa bañada por dos mares: Mar Egeo y Mar Libio.

Sus paisajes son muy diversos: desde las gargantas escarpadas, a las montañas con los pueblos tradicionales, playas interminables de aguas azul turquesa…

Las mejores playas son:

Triopetra. Una hermosa zona a unos 50 km de Rétino, cerca del pueblo llamado Akoumia. Las dos playas principales de Triopetra son mágicas y están separadas por una pequeña península. El nombre de Triopetra proviene de las tres enormes piedras que se elevan majestuosamente en la superficie del mar.
Elafonisi es muy especial por sus playas de color rosado, este hermosa color se debe a la composición de la propia arena: corales, fragmentos de conchas y estructuras de calcio que, después de haberse asentado durante mucho tiempo en el lecho marino.
La laguna de la playa de Balos es un paraíso y una de las zonas más bellas de Creta. Una costa que desciende hacia el mar desde exuberantes promontorios, hasta la hermosa arena blanca y una laguna protegida de las olas. Más allá, separado por una línea muy fina de arena, se ve el Mar Egeo en todo su esplendor. Para llegar hay que acceder en Ferry.
Agios Pavlos, un pueblo costero situado a unos 60 km de Rétino, al oeste de Agia Galini. Este es un lugar que respira paz, armonía, silencio y tranquilidad donde se pueden pasar horas de relax en la playa lejos de los enclaves turísticos más populares. La lengua de arena blanca de Agios Pavlos fluye en un mar de tonos azules y turquesas simplemente irresistibles.
Vai y su bosque de palmeras es uno de los lugares más bellos y evocadores de toda Creta, 200 m de playa que en los 80 fue el preferido de los hippies en Creta.

Playas de la Grecia Continental

No todo son islas en Grecia, e incluso en un viaje solo por la Grecia Continental podremos descubrir magníficas playas para disfrutar días de sol y mar… estas son algunas de las mejores:

En Ática, cuyo nombre deriva precisamente del antiguo «Aktiki», que significa una tierra con muchos «aktes» es decir, costas, no faltan playas, pero si tenemos que destacar una es la playa de Schinias. Esta playa cercana al pueblo de Maratón y dentro del parque nacional de Esquinias es una playa larga de diez km de arena fina. Muy cerca podremos ver el túmulo dedicado a la batalla de Maratón, de donde tomó nombre la popular carrera de 42 kilómetros, «Maratón».
Esta playa es una de las más grandes de la zona y está situada en el extremo de un frondoso pinar. Los árboles llegan hasta la misma playa. Sus aguas son limpias y poco profundas, algo que la hace ideal para ir con familias y niños pequeños.
En el Peloponeso se pueden encontrar kilómetros de playas de arena, con aguas poco profundas y cristalinas, largas y anchas, y cuentan con buenas infraestructuras, lo que las hace ideales para las familias.
- Playa de Voidokiliá, situada al sudoeste de la península del Peloponeso, cerca de la ciudad de Pilos, y de la bahía de Navarino. La playa está orientada al mar Jónico tiene una curiosa forma de omega mayúscula, Ω, la última letra del alfabeto griego. Esta franja de arena circular separa el mar de la laguna de Yálova. Su fina arena y sus cristalinas aguas invitan al relax.
  La bahía de Voidokiliá ya aparece mencionada en la Odisea de Homero. El rey Néstor, uno de los participantes de la guerra de Troya, junto con Ulises, la utilizó ya como puerto.
- Playas de Mavrovouni y Selinitsa. La playa de Mavrouni a 2 km de Gythio, al sur de la península de Maní en el Peloponeso tiene una longitud de 6 km. Y aunque es muy frecuentada con este tamaño caben todos en sus aguas cristalinas y limpias que poseen bandera azul, aunque la arena es gorda y guijarros. Además esta playa es otro de los sitios en el que la tortuga Caretta, en extinción, desova.
  Por su lado Selinitsa, también con bandera azul, es más tranquila, muy apreciada por las familias, no faltan infraestructuras.
En la península Calcídica, al norte de Grecia, también se encuentran buenas playas por sus aguas azules y cristalinas, de arena fina y protegidas por pinares:
- Playa de Sarti. Esta playa de arena muy fina goza de hermosas aguas cristalinas color esmeralda. La orilla de la costa está muy poblada de pinos. Es una playa con turismo local e ideal para familias.
En el Epiro:
- Ammoudiá es un pequeño pueblo de pescadores en la región de Préveza en Epiro, a 9 km de Parga, en la costa septentrional del mar Jónico. Su tranquila playa es de arena fina y poco profunda. Es una playa ideal para familias y niños pequeños. Se encuentra en la desembocadura del río Aqueronte donde forma un delta. Aqueronte era uno de los cinco ríos del inframundo, morada de los muertos. Se cuenta que en sus aguas se hundía todo excepto la barca de Caronte, que pasaba las almas de los difuntos a cambio de un óbolo, moneda que se ponía a los muertos en los ojos para pagar la travesía. Aqueronte puede traducirse como «río del dolor».

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