Convivencia con etnias locales en Guatemala
Cultura Maya
En Guatemala se desarrolló gran parte de la cultura Maya desde hace más de 3000 años, una de las más grandes culturas de la humanidad, con un legado ancestral asombroso, lleno de conocimientos reflejados en monumentos de gran importancia cultural.
La cultura maya sigue viva en las comunidades de los departamentos de Quetzaltenango, Huehuetenango, Quiché, Chimaltenango, Totonicapán, Sololá y la parte norte de San Marcos. En este territorio, de historia prehispánica y colonial, se descubre la cultura maya viva más arraigada del país y entra en contacto con comunidades locales, con su tradición popular, los coloridos mercados al aire libre, la gastronomía, danzas, ritos, procesiones, y por supuesto el conocimiento ancestral de los tejidos, la medicina maya, las dinámicas de vida, y su cosmovisión.
- Chichicastenango:
A 145 kms de la ciudad de Guatemala, fue fundado por Quichés que huían de la destrucción de Utatlán. Es el centro del poblado y de la vida comercial de los “Maxeños” (pobladores de Chichicastenango, derivado de Max, que significa Tomás en lengua Quiché).
Los comerciantes bajan los días jueves y domingos, hasta la plaza central para vender sus artículos, en un impresionante mercado indígena, que poco ha variado durante siglos.
La Iglesia de Santo Tomás, construida en 1540 sobre restos arqueológicos de un templo prehispánico, representa un espléndido ejemplo de arquitectura colonial. En las afueras y en su interior se mezclan los ritos indígenas y ladinos (mestizos, los quien tienen sangre de por lo menos dos grupos culturales). Su escalinata de 18 gradas es el lugar de los rituales indígenas, por sacerdotes mayas chuchkajau, en el interior las familias enteras se arrodillan y rezan ante los altares, cargados de velas, veladoras, ofrendas de flores, alcohol y en algunos casos comida, en ua fusión de catolicismo español y religiosidad ancestral maya.
- Pueblos del Lago Atitlán:
La palabra “Atitlán” proviene de la combinación de dos palabras del Náhuatl, “Atl” que significa Agua, y “Titlán” que significa “Entre”, por lo que se interpreta como “Entre las aguas”. Está rodeado de tres espectaculares volcanes que son el Tolimán, Atitlán y San Pedro.
Y sus orillas están salpicadas por diferentes pueblos mayas que son: Panajachel, Santa Catarina Palopó, San Antonio Polopó, San Lucas Tolimán, Santa Cruz, San Pablo, San Marcos, Santiago Atitlán, San Juan y San Pedro; cada uno de ellos ofrecen experiencias diferentes al turista a través de su cultura y tradiciones.
En San Juan La Laguna el pueblo indígena ha desarrollado un turismo sostenible creando diversas actividades, un día muy especial el día conviviendo con una comunidad maya y compartiendo sus costumbres ancestrales.:
– Visitar la cooperativa de mujeres tejedoras, donde conocer el proceso de realizar una prenda, desde crear el tinte natural, a diseñar y confeccionar la prenda en los telares.
– Descubrir un vivero de plantas medicinales mayas, y como se preparan sus ungüentos y remedios.
– Subir al cerro donde se realizan las ceremonias Mayas.
– Finalmente Alojamiento, almuerzo y cena en casa de una familia maya. - Río Dulce y la Comunidad de Ak-Tenamit:
Esta Comunidad indígena maya de origen Q’eqchí ha creado la Asociación “Ak-Tenamit”, con el objetivo de reducir la pobreza del bosque lluvioso, y la zona en la que se encuentran. Para conseguir este propósito se han creado varios sistemas, de educación para preservar la cultura sin renunciar al desarrollo, ecoturismo comunitario, agricultura sostenible, entre otros sistemas. Se puede visitar este pueblo y su comunidad en un entorno de auténtica belleza.
Cultura Garífuna
Llamados también los Garínagu o Caribes Negros, esta cultura se encuentra en el Caribe Guatemalteco, en los municipios de Livingston y Puerto Barrios.
La historia de los garífunas se remonta en los grupos étnicos de las Islas Antillas, en concreto de las Antillas Menores, dond epar la llegada de Colón habitaba la etnia autodenominada “Calipona”, palabra que se transformó para dar el español “Caribe».
Su organización social reposaba en un sistema militar fuerte, supo resistir victoriosamente el periodo de la esclavitud que siguió, por lo que sobrevivió como etnia, tuvieron que refugiarse en la isla de San Vicente y junto con los habitantes de la isla, pusieron resistencia tan fuerte a los invasores que, a pesar de su armamento superior, estos renunciaron a la ocupación, al menos por un tiempo.
Entonces, en 1642, se hundió un barco portugués, que provenía de África con destino a Brasil con esclavos africanos, en un arrecife cerca de San Vicente. Los africanos del barco se refugiaron en San Vicente, y allí acabaron buscando mujeres y indígenas y mestizas, aumentando así el porcentaje de sangre africana. Que acabó distribuyéndose por la costa caribeña de Centro América desde Belice a Honduras, principalmente.
Por eso en el pequeño tramo del Caribe guatemalteco predomina la cultura Garífuna, conservando su propio idioma, gastronomía, vestuario y, por supuesto, sus danzas dignas de admiración.