¡Tenemos ganas de viajar!

Y si algo hemos podido comprobar en estos meses de pandemias, encierros y restricciones, es que VIAJAR… es un asunto de primera necesidad.

Viajar es imprescindible y la sed de viaje, un síntoma neto de inteligencia.
Enrique Jardiel Poncela.

Nos hemos dado cuenta lo importante que son los viajes para nuestra salud mental, y sin duda espiritual. Si algo no ha decaido en estos meses de encierro han sido las ganas de viajar, de salir del encierro y descubrir el mundo. Los viajes será el premio final por nuestros sacrificios, nuestros esfuerzos, nuestra espera.

Pero las esperanzas que teníamos en la Semana Santa eran pocas – ya no queremos hacernos ilusiones para no decepcionarnos – y nuestras sospechas eran ciertas. Esta Semana Santa tampoco podremos viajar más allá de las fronteras de nuestras comunidades autónomas 🙁

Aunque hay una esperanza en un horizonte no tan lejano…

1. Porque la vacunación contra el Covid-19 avanza lenta pero segura a nivel mundial, dando esperanza y alas a los viajeros ¿volverán los viajes en verano?
   Se espera que la creciente inmunidad de la población alivie las restricciones de entrada a turistas. Y aunque seguiremos conviviendo con el Covid-19 durante muchos meses aún, estudios demuestran que los viajeros “abogan por gestionar los riesgos y aprender a vivir y viajar con el virus” (Estudio IATA), así gran parte de los viajeros cree que los gobiernos deberían reemplazar los cierres de fronteras por la realización de pruebas, lo que unido a la vacunación aportaría las garantías suficientes para que haya un reinicio turístico seguro
2. ¿Pasaporte COVID free?
   Una de las medidas que se viene barajando por parte de varios gobiernos, entre ellos España, es la implantación de un certificado de vacunación internacional o pasaporte COVID free. La creación de un documento de viaje de este tipo ha generado un intenso debate en el seno de la Unión Europea porque se teme que «pueda ser discriminatorio respecto a las personas que aún no hayan sido vacunadas o no quieran ser vacunadas»… pero ¿acaso no existen ya precedentes en la famosa «cartilla de vacunación internacional”, un documento que creo la Organización Mundial de la Salud hace casi 100 años como un documento de viaje o «pasaporte médico» que se reconoce internacionalmente y que es necesario para ingresar a ciertos países donde existen mayores riesgos para la salud de los viajeros, imprescindible por ejemplo en países con riesgo de Fiebre Amarilla.
3. PCR’s… y mientras tanto estas pruebas son las mejores opciones para optar a entrar en la mayoría de los destinos.
   

Pero sí, todo ello alienta al regreso de los viajes a medio plazo. Y este regreso además será con más seguridad que nunca. Aunque al igual que pasó tras los atentados del 11S, en que la forma de viajar en avión cambió, vamos a tener que adaptarnos a otros protocolos de viaje.

1. Aeropuertos y aviones. Lugares en los que a priori la distancia de seguridad no es fácil de asegurar, pero donde se apuesta por una higienización constante de los espacios públicos, así como la entrega de mascarillas y gel hidroalcohólico, sobre todo en aquellos viajes de más de 3 horas que requieren un cambio de mascarilla para garantizar su eficacia. Igual que de momento las comidas en los aviones se entregan en paquetes individualizados tipo picnic, y no se entregarán revistas ni folletos de papel.
   Pero las colas serán más largas por las distancias, y algo bueno que hemos comprobado la limpieza de las cestas en las cintas de equipaje es mucho más exhaustiva.
   Uno de los miedos de los viajeros en el interior de los aviones es el estar encerrado con cientos de personas respirando el mismo aire durante horas, pero hay que insistir en que el interior de los aviones están equipados con sistemas de filtrado y regeneración de aire que los hacen más seguros que muchas lugares en tierra. Ya que los aviones utilizan dos sistemas diferenciados para gestionar el aire acondicionado dentro de la cabina, con el fin de proporcionar aire respirable a los viajeros.
   – El primero de los métodos de gestión se encarga de introducir aire exterior dentro de la cabina, con una derivación de aire del motor que se comprime y se mezcla para calentarlo (la temperatura exterior a 10.000 m puede bajar hasta -50ºC) y de esa manera se elimina cualquier rastro de impureza. Así aproximadamente el 50% del aire que tenemos en la cabina de pasajeros del avión es aire nuevo recién inyectado desde la atmósfera.
   – Y por otro lado existe un complejo sistema de recirculación interna que emplea filtros HEPA (High Efficiency Particulate Air) que consiguen atrapar el 99,97% de las partículas tales como bacterias o virus, y que aporta el otro 50% del aire en cabina. Prácticamente cada dos minutos todo el aire de la cabina del avión ha pasado por un filtro HEPA
   
   

   Azafatos de avión con las uvas de fin de año 2020

2. En destino.
   • Los hoteles se han puesto a la cabeza de las medidas de higiene con: checkin contact free; puntos de gel en la recepción, entrada a zonas comunes como restaurantes, ascensores, y ofreciéndolo como “amenities” en las habitaciones; y se  ha optado por eliminar aquellas decoraciones que no tenían una limpieza diaria como cojines y colchas, y por supuesto han eliminado también el papel.
     Los desayunos buffet han vuelto pero con medidas, como pinzas individuales para tomar los alimentos, o mayor atención de servicio en la mesa.
   • Visitas, como ya pudimos comprobar los viajeros por España en verano de 2020, las visitas guiadas han reducido su número de personas para garantizar distancias de seguridad, y realizar visitas con toda la confianza. O se han implementado las audioguías higienizadas.
   • Mascarilla de viaje ¿Aun tendremos que convivir con la mascarilla? Sí, aun nos quedan meses de convivencia con mascarilla, hasta es posible que ya no la eliminemos de nuestra vida al 100%, al igual que en los países asiáticos llevan decenas de año usándolo en su día a día.
     

     Familia Vietnam, con mascarillas antes del Covid-19

3. Agencias de viaje ¿Por qué viajar con agencia?Por supuesto muchos viajeros seguirán organizando los viajes por su cuenta y con ayuda de las múltiples plataformas de reservas online de hoteles y vuelos… pero durante los primeros meses de crisis por la pandemia, los viajeros ya  pudieron comprobar la importancia de las agencias de viaje,  una importancia aún más evidente después de la crisis global por el coronavirus. Algunas razones sobre el porqué elegir una agencia de viajes en vez de organizar el viaje por tu propia cuenta:
   • Seguridad. La tranquilidad que te ofrece una agencia, donde los profesionales están capacitados para  lidiar con las situaciones complicadas que pueden surgir en un viaje: problemas con los vuelos, los traslados, los hoteles e incluso las visitas. Estos problemas con una buena agencia pueden salvarte de una mala experiencia.
     Los agentes estamos para solucionar los problemas coordinando los servicios del destino, coordinados con las agencias locales, los socios en destino, teniendo la seguridad de que la agencia local va a conocer la situación mucho mejor que el viajero, aconsejando y modificando el viaje según la situación actual. Y con la incertidumbre sobre el turismo después de la pandemia de coronavirus, esta labor es aun más importante…
   • El agente – asesor de viajes. Hasta la llegada de la pandemia la web era un gran escaparate de ofertas e información de viajes, y sobre todo las nuevas generaciones de viajeros preferían hacerlo por su cuenta, alejándose de las agencias de viajes. Por eso en los últimos años ya había ido cobrando mayor relevancia el papel de “asesor de viajes” o «Personal travel consultant», enfocado en la personalización y creación de experiencias frente al agente como mero vendedor de un catálogo de productos.
     Los profesionales del turismo, agentes-asesores, tenemos como centro y prioridad de nuestro negocio a nuestros “viajeros”, no los vemos como «solo clientes» o números de un servidor de ventas, sino como viajeros, y nuestra labor no es solo vender un producto, nuestra labor es “cumplir sueños”… por ello nos centramos más en el viajero para adaptarnos a sus necesidades, entender y compartir sus miedos y preocupaciones, y así poder reducirlas al máximo.
     La pandemia ha puesto en valor este papel de las agencias para resolver los problemas de los viajeros: cancelaciones, retrasos, regresos anticipados desde los destinos cerrados, el resolver las dudas, disipar las incertidumbres, y sobre todo acompañarles en un viaje con un contacto directo, creando un canal abierto de comunicación que no respondía en motores de búsqueda, o contestadores automáticos. La confianza de saber que la otro lado hay una persona de carne y hueso que nos conoce, que responderá en caso de emergencia, sin duda regenera la confianza de los viajeros en las agencias de viaje… y en su “asesor de viajes personal”.
   • Políticas más flexibles. Las agencias, emisoras y receptivas, más que nunca estamos en la línea de flexibilizar las políticas de reserva y cancelación, empezando por nuestros proveedores en destino tan importantes en la cadena de los viajes.
   • Mayor y mejor comunicación, antes, durante y después del viaje. Siempre he apostado por la comunicación directa, de un manera clara y lo más rápida posible con los viajeros, que han de sentirse  acompañados durante todo el proceso del viaje. Y este proceso empieza desde el momento mismo del inicio de la planificación del itinerario.
     Una información clara y completa ante las incertidumbres de restricciones, cierres de fronteras, o cambios e incidencias antes y durante. Si siempre ha sido importante en estos momentos de tantas incertidumbres el agente más que nunca tiene que acompañar con informarles y ayuda, con rapidez en las gestiones y resoluciones de problemas que encontramos en el camino…
     

     Resticciones Covid-19 por todo el mundo
   • Importancia de los Seguros de Viaje. Y por más que lo deseemos…los asesores de viaje no somos superhéroes, y no podremos cubrir todas las necesidades del viajero, por ello siempre apostamos y recomendamos viajar con buenos seguros de viaje.
     También las aseguradoras han entendido que tienen que adaptarse al momento de crisis actual por el COVID-19, y muchos ya ofrecen seguros COVID-19 que incluyen:
     – Prueba PCR antes de la salida para garantizar la entrada en destino.
     – Asistencia médica frente al Covid-19 en destino.
     – Cancelación del viaje por positivo Covid-19 del viajero o algún miembro de la familia.
     – Prolongación de estancia en caso de no poder regresar a casa por un positivo Covid, y tener que permanecer en cuarentena en hotel del destino.
   • ¿Es más caro contratar con una agencia de viajes? No siempre. como no siempre es más económico organizar un viaje por cuenta propia.
     Por supuesto si lo que se desea es un viaje «low cost» y mochilero, es una buena opción, también lo es que parte del encanto de estos viajes es la incertidumbre que genera, y la capacidad de cada uno de resolverlos in situ, es la aventura del viajero explorador, una apasionante forma de viajar.
     Pero en general, si lo que busca el viajero es confianza, tranquilidad, calidad y la certeza de que el viaje va a transcurrir sin sobresaltos… y que si estos surgen vamos a estar respaldados con soluciones eficaces, entonces es mejor confiar en tu «agente-asesor». Con un profundo comoncimiento de los destinos, actualizaciones constantes gracias a los proveedores en destino… novedades únicas. Para los que desean viajar sin preocupaciones es sin duda la opción 😉
     Y ya se sabe que a veces lo barato sale caro, y si todo sale bien no hay problema , pero en cuanto haya la más mínima incidencia el viajer nos podrá salir muy caro, económica y emocionalmente.
4. Viajes más sostenibles, viajeros más responsables.
   Quizás una las ventajas de esta pandemia ha sido darnos cuenta del pequeño lugar que ocupamos en el mundo, de la fuerza de la naturaleza, y la capacidad de regenerarse cuando los humanos desaparecemos de la escena. Debemos regresar a los viajes con mayor conciencia de que debemos cuidar de nuestro planeta y de los destinos a los que viajamos, y a los que queremos seguir viajando sin que desaparezcan ante las masificaciones turísticas.
   ¿Iremos por fin hacia un turismo más respetuoso y sostenible, eligiendo mejor los transportes, los alojamientos y las actividades? Reduciendo quizás la cantidad, en favor de la calidad: menos viajes, pero más largos, modo slow, disfrutando el camino… coleccionando más momentos y experiencias de vida.
   Del equilibrio que consigamos entre nuestros deseos viajeros y el respeto a los destino, dependerán la posibilidad de los viajes para las generaciones futuras.
   Y, por supuesto el turismo responsable y sostenible no solo afecta al medio ambiente, el mundo animal y los monumentos únicos, afecta en gran medida a una inmensa población mundial que vive gracia al turismo. Encerrados en nuestras burbujas de ayudas gubernamentales del mundo occidental y desarrollado, se nos olvida esa gran cantidad de países del segundo y tercer mundo que no han contado con esas ayudas y llevan sufriendo sin turistas, su forma de vida, desde el principio de la pandemia. Debemos poner en valor el trabajo de la población local, su conocimiento del destino, ¡viajemos y consumamos localmente!.
   

   Mercado local de Luang Prabang, vendiendo y conciliando.

   No hay mayor impulso a la economía aquí nuestra cas, en España, como en los destinos más remotos y exóticos del mundo, donde gran parte de la población vive del turismo. Y es que el turismo es el motor que activa la economía de transportes y alojamientos, pero también de la hostelería y los pequeños comercios, las agencias que envían viajeros, y las que los reciben, los guías turísticos, los conductores, los monitores de distintas actividades… Por eso nosotros como agencia optamos por trabajar con las agencias locales, para que la economía llegue directamente a los trabajadores locales, sin intermediaros.Los viajes mueven el mundo, e incrementa el bienestar de las comunidades, es el movimiento más globalizador y soldario que puede existir, y al mismo tiempo que lo disfrutamos.

Por todo ello, no dejemos de soñar…

¡y sigamos viajando!

¡Atención viajeros intrépidos y avezados! Porque los que se adelanten a viajar en este año contarán con algunas ventajas, … no todo va a ser malo:

• Destinos sin masificaciones:
  • Algunos destinos que ya estaban colapsados de turistas nos las encontraremos más tranquilos…
  • Sin aglomeraciones, sin grandes colas en las más emblemáticas atracciones.
  • Pudiendo tomar esa foto mágica para el recuerdo sin decenas de cabecitas por detrás haciendo su propia foto…
  • Las playas nos dejarán ver la arena sin tanta toalla y sombrilla.
    

    Efeso, Turquía, febrero 2021

• Mejores Precios. Los primeros viajeros seguro obtendrá precios más competitivos, y las condiciones serán más flexibles.
• La gente local nos acogerán en los destinos como un regalo caido del cielo.
• Perder el miedo...¡Estados de alerta, toques de queda, cierres perimetrales…. !El mundo está en alerta máxima y nos produce miedo e incertidumbre estar lejos de casa…  Pero cuando salimos fuera y comprobamos que el mundo sigue haciendosus vidascon las mismas precuaciones que nosotros, con mascarilla,s distancias, aforos reducido… y comrpobamos de primera mano como todos los actores  del turismo se esfuerzan para dar seguridad a los viajeros… uno vuelve más confiado, más seguro… y con un sentimiento de hermanamiento increíble ¡todos estamos en el mimos barco!
• Y por supuesto volveremos con las pilas cargadas, recordando como iniciamos este artículo, “viajar es un asunto de primera necesitad”… y los beneficios para nuestra salud física y mental serán grandes.

Los destinos que siempre soñaste, ahora casi para ti solo, o como si fuera uno de aquellos viajeros pioneros del siglo XIX con todas las comodidades del siglo XXI.